viernes, marzo 14, 2014
| Japan Weekend VII. |
| Blanca Nieves: Mírame, pareciera que quieres entrar en mi escote. |
| Lobo Feroz: ¿Y qué? ¿Para qué ibas a llevar un escote sino quisieras que lo mirasen? |
| Blanca Nieves: Quizás las mujeres llevan escote para separar a los caballeros de los perros, los pocos que puedan mirarnos a los ojos en presencia de unos pechos como estos, tal vez tengan algún potencial. |
| (Fábulas en el exilio) |
La leyenda de la estrella errante. Al mirar al cielo hay un pequeño hueco vacío apenas imperceptible entre la constelación de Andrómeda y Perseo. La pequeña estrella Aniram que una vez posó estática en el firmamento, un día decidió abandonar su ilustre posición galáctica y marchar lejos, muy lejos. Era tanto su deseo que cruzó los límites de aquel cielo de estrelladas hermanas y marchó presta a situarse al lado de la diosa Atenea. Pues siempre había sido este su sueño. Poder estar al lado de la diosa. Y cuentan en muchos poblados que Aniram consiguió su meta después de muchas penurias, de muchos esfuerzos, de muchas fatigas. Y habiendo traspasado los límites autoimpuestos por su propia imaginación ... La encontró. Y nunca más se marchó.
(UTLA)
Cierra tus ojos, encuéntrate y sigue para adelante. Buena Suerte.
Un Tranquilo Lugar de Aquiescencia
