Muchos preguntasteis acerca de la extraña partitura que acompañaba este relato.
Relato: Fa bemol
La música me enseñó hace años sus fantásticas tonalidades denominadas sostenidos o bemoles; su uso permite subir medio tono (sostenido) o bajar medio tono (bemol) el sonido de una nota. A este hecho se le llama «altura de la nota».
En los pianos que existen en la Tierra existen «teclas» de color negro para representan estos sonidos.
Como podemos observar un LA puede también ser un LA sostenido o un LA bemol.
¿Pero que sucede cuando un FA se convierte en bemol, o un SI en sostenido? No existe nota negra para ellos; llegados a ese caso la nota es enarmónica, es decir, aunque se sigue escribiendo igual, representa otra nota, se convierte en otro sonido.
FA bemol me hizo pensar que el nacimiento no condiciona lo que uno puede llegar a ser, puesto que él naciendo FA se convirtió con su bemol en un MI.
Fa bemol me acababa de enseñar como «todo» no es lo que uno aprecia a primera vista.
Pero la musicalidad no había acabado ahí :
«Las notas musicales viven su propia existencia al margen de todos nosotros».
Y fueron ellas mismas las que compusieron el relato y no al revés. Dejad que os explique como las encontré ocultas entre los pliegues de las preciosas palabras.
En el relato aparecen las notas musicales con su nombre, FA, DO, MI, SOL, LA...
Recopilé la separación existente entre palabras, eso me proporcionó la pista de su duración, y llegué a esta aproximada conclusión.
El espacio entre notas, la cantidad de palabras, era el tiempo que la nota vibraba.
Las notas me estaban hablando, pero aún necesitaba reinterpretarlas, adecuarlas a mis sentidos, y ya de paso a los vuestros. Use el pentagrama.
«El pentagrama es a la música, lo que el papel en blanco es a la escritura». ^^
Alegre por este descubrimiento realicé la lista de notas con sus correspondientes duraciones.
Y la partitura apareció ante mí. Las notas hablaban con voz propia, ellas habían creado el espacio; las palabras sólo rellenaban de manera inteligible para nosotros, lo que tan bellamente habían hilvanado ellas solas en su propia existencia.
Y así las descubrí, vibrando por océanos de tiempo paralelos a los nuestros, llegando hasta nosotros desde su propia existencia.
La música posee el poder de emocionarnos porque por un instante modifica las ondas de nuestro interior y nos permite conectarnos con esa inmensa fuerza que mueve todo el universo...
«Sólo existe el amor».
Un abrazo a tod@s. ^^
Un Tranquilo Lugar de Aquiescencia
Soy un completo ignorante de la música, me conformo con saber escuchar, que no es poco.
ResponderEliminarUn abrazo
Estimado Maestro Cahiers,
EliminarNo es poco, es mucho, pues falta mucos seres que sepan escuchar, eso es todo un don. ^^
Gracias por aportar tu conoimicneot, compañero.
Un abrazo Pepe.
Y hasta para explicarlo resultás ser un genio. Ni en sueños lograría una cosa semejante.
ResponderEliminarEstimado Raúl,
EliminarNo hace falta ser ningún genio.
Tu por ejemplo realizas acciones mucho más grandes señor Bruto coordinador. ^^
Siempre es un placer leerte, imparable compañero.
Un abrazo estimado Raúl.
Mi padre era músico en una Big Band (Orquesta Florida). Me fascinaban sus partituras, me parecían extraños códigos. Recuerdo que en la novela "El puente sobre el Rio Kwai" los japoneses ejecutaban a un inglés -músico aficionado- creyendo que sus partituras eran mensajes cifrados para los aliados.
ResponderEliminarSaludos!
Borgo.
Estimado Mr. Borgo,
EliminarOh! Es que posiblemente era un espía escribiendo en ese idioma secreto de la música. Mi padre también perteneció a una banda ed joven, en este caso, "Los Twisters". nombres de antaño. ^^
Siempre aportadno tanto miquel,
un abrazo miquel.
Jolín que chulo! Tu siempre tan original :) Espero que todo bien
ResponderEliminarPD: no me digas nada que suficientemente culpable me estoy sintiendo yo solita...mi blog abandonado me ataca por las noches
Estimada Mia,
Eliminarcuanto tiempo. Muchas gracias, ya sabe que la mente no cuerda siempre busca un camino para surgir.
La última vez que fui por su casa, tenía una entrada cada mes, no hacen faltan muchas entradas, si las pocas que haya son sentidas.
Hoy la visitaré. No lo deje. La escritura siempre es tan embriagadora. ^^
Un abrazo estimada Mia.